63°. Deby y Alex y mi última noche en NY
Era mi último sábado en New York, yo sentada a la barra de mi bar preferido, el barman sirviéndome un trago de despedida para paliar mi tristeza, inventado especialmente para mí, de color amarillo y rojo, ni muy dulce ni muy amargo. Perfecto. Una pareja apostada cerca se interesó por los shots que compartíamos con el barman (porque por cada uno que me servía a mí, él se bajaba otro), y así acabamos brindando los cuatro. No recuerdo bien cómo (tenía yo ya varias copas encima) terminé hablando con esta pareja sobre “la pareja”. Ellos no lo eran. Se habían conocido en la adolescencia, Debby era unos años más chica que Alex, encandilada por un tipo más grande que se iba a la universidad, habían tenido un romance loco y hermoso que, por lo que pude deducir, terminó porque él quiso. Hicieron sus vidas lejos, ella se casó y tuvo una hija, ahora estaba divorciada. Él tuvo parejas, pero nada quedó. Años después, se habían reencontrado. Debby vivía en Manhattan, Alex en Los Ángeles, y mantenían